El Museo de la Felicidad existe y está en Madrid

Es un recorrido sensorial para activar el bienestar a lo largo de una superficie de 600 m2 dedicados a experiencias lúdicas, emocionales y sensoriales.
En pleno centro de Madrid, una propuesta cultural innovadora invita a reconectarse con una emoción tan buscada como intangible: la felicidad. Se trata del Museo de la Felicidad (MüF), un espacio que combina entretenimiento, neurociencia, psicología positiva y arte interactivo para que el visitante explore, a través del juego y los sentidos, qué significa sentirse feliz.
La experiencia no es convencional. Desde el primer paso, el recorrido estimula la participación activa con más de 20 instalaciones y dinámicas inmersivas, entre ellas una máquina de risoterapia, un espacio con «abrazadores» que reconfortan, zonas multisensoriales, y hasta un tobogán interno que conecta los distintos niveles del museo, diseñado para liberar dopamina y activar las llamadas “hormonas de la felicidad”.
El Museo de la Felicidad está concebido como un espacio apto para todo público, ideal para disfrutar en solitario, en familia, con amigos o en grupos corporativos. Su propuesta busca generar momentos memorables a través de actividades que apelan tanto al cuerpo como a las emociones, como escribir una carta a un futuro yo, participar en juegos colaborativos, escuchar mensajes positivos o relajarse en una cápsula de bienestar.
La muestra se complementa con datos científicos y recursos pedagógicos que explican cómo funciona el cerebro frente a estímulos positivos y cuáles son los hábitos que contribuyen a una vida más plena. Todo, en un entorno colorido y dinámico que pone el foco en la experiencia sensorial y emocional del visitante.
El Museo de la Felicidad de Madrid se suma a una tendencia creciente en otras capitales del mundo, donde los museos experienciales y emocionales ganan terreno frente a los formatos tradicionales. Lejos de ser un espacio contemplativo, MüF busca que cada persona se convierta en protagonista de su propio bienestar.