República Checa y el turismo sustentable

El país centroeuropeo ha experimentado una notable transformación en su industria turística. Ya no es más un destino exclusivamente centrado en Praga: hoy, avanza con una estrategia diversa, sustentable.
En 2023, la República Checa recibió 22,8 millones de huéspedes en sus alojamientos turísticos, que sumaron 57,3 millones de pernoctaciones. De ese total, el 54 % fueron turistas nacionales y el 46 % visitantes extranjeros, lo que marca una recuperación sostenida en la llegada de viajeros internacionales. La estancia media fue de 3,5 días, el mejor registro de llegadas desde 2012. En términos interanuales, el turismo extranjero creció un 10 %, mientras que el doméstico se mantuvo estable, lo que refuerza el buen momento del sector.
Aunque Praga sigue siendo el principal imán turístico, otras regiones también crecen. František Reismüller puntualiza que en 2023, se incrementó la llegada de visitantes a diez regiones, en particular Moravia del Sur y Bohemia del Sur. Karlovy Vary, famosa por sus balnearios, lideró el ranking de estadías con una media de 4,7 días.
El país trabaja para promover el turismo activo, el bienestar y el disfrute gastronómico en un entorno seguro y sostenible. Una de las apuestas más destacadas es la colaboración con la guía Michelin, que por tres años promocionará la oferta culinaria checa a través de una edición electrónica anual y contenidos audiovisuales en redes sociales. Esta alianza posiciona a la República Checa como destino gastronómico emergente y busca atraer al turista exigente, que valora la innovación y la calidad basada en ingredientes locales.

Más allá de Praga: Tesoros ocultos
Si bien la capital es el punto de partida, la República Checa tiene otros destinos fascinantes:
- Český Krumlov: Un pueblo medieval con un castillo impresionante y calles adoquinadas que parecen sacadas de un cuento.
- Karlovy Vary: Famosa por sus aguas termales y su arquitectura elegante, esta ciudad balneario es ideal para el descanso.
- Kutná Hora: Hogar del Osario de Sedlec, una capilla decorada con huesos humanos que es una de las atracciones más curiosas del país.
- Brno: La segunda ciudad más grande, con una vibrante escena cultural y el misterioso Castillo de Špilberk.
Naturaleza y aventura
Para los amantes de la naturaleza, la República Checa ofrece paisajes espectaculares. Desde el Parque Nacional de la Suiza Bohemia, con sus formaciones rocosas únicas, hasta las montañas de Krkonoše, ideales para el senderismo y el esquí.
La República Checa es un destino que combina historia, cultura y naturaleza en un solo viaje. Ya sea recorriendo sus castillos, disfrutando de su gastronomía o explorando sus paisajes, este país tiene algo para cada tipo de viajero.