Tecnología contactless para optimizar tiempos en aeropuertos

Se llama Fly to Gate y fue desarrollada por el grupo tecnológico francés Thales. Reduce en casi un tercio el tiempo que los pasajeros tardan en hacer trámites de embarque y tránsito. 

La digitalización apunta al autoservicio de un extremo al otro en todos los procesos habituales de un aeropuerto, desde la entrada hasta el embarque, incluyendo el check-in. Y para preparar este futuro no muy lejano, Thales presentó su solución Fly to Gate, que integra tecnología biométrica y de identidad digital.

Ese grupo industrial, conocido por ser uno de los mayores actores mundiales de la industria aeroespacial, se involucra también en el desarrollo de soluciones, servicios y productos para el transporte, el control de identidad y la seguridad digital. Con Fly to Gate se dio el objetivo de reinventar la experiencia de las personas en los aeropuertos. 

Para tales fines, desarrolló un conjunto de soluciones de embarque digital que podrían ayudar a reducir hasta un 30% del tiempo de los viajeros. Al mismo tiempo, fortalece los niveles de seguridad en las terminales aéreas.

Con este sistema, el viajero autogestiona sus trámites desde su celular, realizando la verificación de sus documentos de viaje y creando un registro biométrico mediante una herramienta de identificación facial y de detección de prueba de vida. Este sencillo proceso de comprobación de identidad, que solo demora segundos, genera un token de identidad digital único para cada persona. A continuación, con este token (que contiene la identidad y la información de embarque), el viajero puede circular en el aeropuerto y continuar con todo el proceso restante, sin necesidad de volver a mostrar documentos físicos y pudiendo ser identificado en segundos a través de procesos de reconocimiento facial, en todos los puntos de contacto y verificación: despacho de equipaje, control de seguridad, salones VIP, etc. El token único digital incrementa los niveles de seguridad en las terminales aéreas, ya que evita la posibilidad de fraudes de identidad. 

Además de beneficiar a los pasajeros, Fly to Gate, favorece también a los aeropuertos y las líneas aéreas, disminuyendo los tiempos de espera, haciendo más eficientes los procesos de seguridad y control migratorio, y ampliando la permanencia de los pasajeros en los espacios de ocio.

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