El fabuloso tren bala japonés

La red de ferrocarril de Japón cubre todo el territorio y es la más puntual y segura del mundo. El tren es incluso una excelente alternativa al avión gracias a las líneas de alta velocidad entre las principales ciudades.

Cuando uno viaja por Japón, es imprescindible contar con un Japan Rail Pass. El archipiélago tiene una de las redes ferroviarias más densas del mundo y es posible llegar a cualquier destino con el tren. Además, se puede probar la sensación de viajar a 300 km/h a bordo de los lujosos y futuristas Shinkansen, los famosos trenes balas, que conectan las principales ciudades del país.

Japón cuenta con ramales de ferrocarril desde los años 1870 y actualmente tiene un total de 30.625 km de vías. Sus trenes transportan a más de 9 millones de pasajeros cada año y 46 de sus estaciones figuran entre las 50 más transitadas del mundo.

Algunos consejos

Aunque todas las líneas tengan su propio nombre (muchas veces es él de la ciudad de cabecera), no es fácil entender el sistema japonés. Además, fuera de Tokyo y de los principales centros turísticos, los carteles no suelen ser traducidos al inglés. La única manera de poder asegurarse de subir a bordo del tren correcto es confiar en la hora. Japón no solo tiene la red más importante del mundo. Es también la más puntual.

La mayoría de los trenes nipones son operados por el JR Group, conformado por varias empresas privadas. La entidad controla el 80 % del total de la red. Es el organismo que vende los pase Japan Rail Pass, indispensable para moverse por las cuatro principales islas. El pase sirve incluso para buses y barcos y para algunos ramales del transporte público de Tokyo como la muy útil Yamanote Line, que circunvala la ciudad.

El Shinkansen

Viajar a bordo de esos trenes ultrarápidos es una experiencia que tiene que formar parte de cualquier viaje a Japón. Son formaciones que disponen de su propia red, ya que la distancia entre rieles que necesitan es distinta a las demás. Por lo general, ofrecen conexiones entre las principales ciudades de Japón y realizan muy poca -cuando ninguna- parada intermedia. Es necesario efectuar una reserva de asientos, sin cargo para titulares de un JR Pass.

Cuando se viaja desde Tokyo hacia el suroeste, el tren pasa al pie del Monte Fuji y ofrece una de las mejores vistas sobre el mítico volcán. A pesar de la velocidad, no se siente ninguna vibración y el ruido es mínimo dentro de los vagones. La impresión de velocidad se da solamente cuando uno mira por los amplios ventanales y ve el paisaje desfilando muy rápidamente.

A bordo de los vagones, cada pasajero tiene su asiento designado, con mucho espacio para las piernas y para colocar bolsos. Los japoneses suelen aprovechar el viaje para comer y llevan sus propios bentos (envases de comida preparada). Sin embargo hay un servicio de venta de snacks a bordo.

Otros trenes japoneses

Además de los Shinkansens, el servicio ferroviario está constituido por trenes Limited Express (con paradas en las estaciones principales); Express, Rápidos y Locales (que paran en todas las estaciones; la línea Yamanote forma parte de esta última categoría). La mayoría de los trayectos están incluidos en el pase de JR. Al igual que los trenes que conectan el centro de Tokyo con los aeropuertos de Haneda (por monorail), Narita y Kansai. Existen también muchos trenes turísticos locales y algunos todavía están impulsados por locomotoras de vapor.

Japan Rail Pass

Se compra para duraciones de 7, 14 o 21 días. Los viajeros que no piensan utilizar el tren y no quieren invertir en un pase deberán comprar billetes en los distribuidores automáticos, en los andenes de las estaciones. Se pueden comprar también tarjetas recargables, que sirven para trenes, buses y el subte. En Tokyo las dos más populares se llaman Pasmo y Suiza y se venden en las estaciones. También se usan para pagar en ciertos comercios y restaurantes.

A pesar de contar con un pase de JR, hace falta reservar su asiento -sin cargo- en muchos trenes, y especialmente los de alta velocidad. La manera más fácil es hacerlo en las oficinas comerciales de las estaciones, donde suele haber empleados que hablan inglés. Junto al pase, el pasajero deberá mostrar el ticket de reservación de asiento a los controladores.

Otro punto a tomar en cuenta: los titulares de pases pueden ingresar a las estaciones y los andenes sin pasar por los pórticos de control. Deben mostrar su documento de viaje al empleado ubicado en una cabina al final de la línea de pórticos.

Conducta

Todos los pasajeros deben respectar conductas sociales muy codificadas en las estaciones: se utilizan las escaleras mecánicas por la izquierda, se respetan las filas de espera en todo momento y se buscan las marcas en el piso para estar frente a la puerta que corresponde y facilitar el proceso de embarque en los trenes.

A bordo de los vagones, hablar fuerte, hablar por celular o escuchar música sin auriculares son muestras de una total grosería.

También te podría gustar...